Mejores Estrategias Para Ganar en Juegos de Casino

Si eres nuevo en el mundo de los casinos online, lo mejor es tomar algunos consejos para comenzar con buen pie, y así tener más posibilidades de ganar desde el principio. Por ello, en esta ocasión te traemos una lista de las mejores estrategias para ganar en juegos de casino en línea en Argentina.

Tabla de contenidos

• Elige un casino confiable
• Aprovecha los bonos
• Escoge tu juego favorito
• Aprende las reglas
• Investiga los trucos y estrategias
• Práctica antes de apostar
• Establece un presupuesto
• Pon un límite de pérdidas
• Establece horarios de juego
• No consumas bebidas alcohólicas ni otras sustancias mientras juegas

Elige un casino confiable

El primer paso para obtener ganancias en un casino online es escoger uno de confianza. Este casino en línea debe contar con la certificación y licencia de Argentina, de lo contrario, nada asegura que te envíen el dinero ganado en las apuestas. 

Incluso si se trata de un casino internacional, no tener la licencia puede provocar muchos problemas a la hora de retirar por las restricciones del país a los bancos. 

Aprovecha los bonos

Al escoger el casino certificado, lo mejor es compararlo con otros para poder conseguir los más altos bonos de bienvenida, y con las mejores condiciones. 

Estos bonos son otorgados a todos los jugadores nuevos, llegando a duplicar la cantidad que el usuario ingresa a la web como depósito. Pero, las condiciones pueden pedir que, para liberar las ganancias de estas apuestas, el jugador apueste varias veces la cantidad del bono, estas pueden ser 20x, 50x o hasta 70x.

Además, los casinos ofrecen bonos de depósito, de lealtad, y muchos más. Hay que estar atento a estos bonos, puesto que permiten multiplicar las ganancias al dar más oportunidades de jugar. 

Escoge tu juego favorito

Probar todos los juegos, sin ningún plan, y apenas conociendo lo mínimo de cada uno de ellos, es lo peor que se puede hacer si se quieren aumentar las probabilidades de ganar en los juegos de casinos online. 

Al contrario, lo ideal es escoger uno o dos juegos, y centrarse por completo en estos, sobre todo si se trata de juegos de habilidad. 

Hay que tener en cuenta que existen juegos que se basan completamente en las probabilidades y la suerte, que son las máquinas tragamonedas y el bingo. Por otra parte, hay algunos juegos de azar en los que se pueden aplicar los conocimientos de probabilidades, como ocurre en la ruleta. Sin embargo, esto es lo máximo que se puede hacer, y las estrategias para ganar se basan en aprovechar los bonos y poco más. 

Por otra parte, están los juegos de menor y mayor estrategia. El póker destaca por ser un juego basado en la estrategia, con un poco de azar de por medio. Los mejores jugadores de póker, son los que pueden predecir las combinaciones de sus oponentes y, por ello, saber si deben seguir o retirarse. 

Lo mismo pasa en el blackjack, en el que es común aprender a contar las cartas de varias maneras, para no cometer un error. 

Aprende las reglas

Una vez que se eligió el juego, se deben aprender las reglas, así las distintas versiones del juego. 

Cada versión puede traer un gran cambio en las reglas del juego, al punto en el que casi parece un juego diferente. Esto puede traer tanto ventajas como desventajas al jugador, por lo que resulta fundamental elegir bien la versión que más favorece al usuario. 

Investiga los trucos y estrategias

Incluso juegos de completo azar como la máquina tragamonedas puede tener algunos trucos. 

Por ejemplo, la máquina de jackpots progresivo suele otorgar el premio mayor, de millones de dólares, en un intervalo que va de 3 meses a 9 meses, dependiendo de la máquina. Si sabes cada cuánto suele dar el premio mayor, puedes evitar jugar cuando el bote progresivo acaba de ser vaciado.

Así mismo, juegos como el blackjack, el bingo, la ruleta y cualquier otro poseen sus propios trucos y estrategias, es cuestión de buscar bien. Si bien estos trucos no aseguran la victoria al 100%, aumentan en gran medida las probabilidades de ganar. 

Práctica antes de apostar

Muchos casinos ofrecen las versiones “demo” de sus juegos. Gracias a estas, el jugador puede aprender el juego, y jugar con confianza, sin tener que apostar. Las apuestas llegan después, cuando el usuario está seguro de que tiene oportunidades de ganar, al conocer por completo el juego.

Estas versiones suelen tener un número limitado de pruebas, pero, igualmente, se puede seguir jugando en páginas de juegos de azar sin apuestas. Por lo general, tienen casi todos los juegos que se pueden encontrar en un casino real, y el usuario ni siquiera tiene que registrarse. 

Establece un presupuesto

Una de las estrategias más importantes es la de establecer un presupuesto. Esto puede parecer un poco contradictorio, ya que implica apostar menos, pero, al hacerlo, se apuesta de forma más inteligente. 

Cuando se marca un límite de lo que se puede depositar y, por tanto, apostar, el jugador tiende a ir por las apuestas más seguras, en vez de dejarse llevar por la emoción. A su vez, este comportamiento ayuda a evitar los problemas de adicción, y fomenta el autocontrol desde el primer juego. 

Pon un límite de pérdidas

No solo se trata de tener un límite a depositar. Marcar un límite en las pérdidas puede ser de gran ayuda para saber cuándo retirarse, cuándo se está en una mala racha. 

Algunos casinos tienen la opción de programar esto, para que el jugador sea retirado automáticamente del juego al llegar al límite establecido de pérdidas. 

Establece horarios de juego

Siguiendo los dos consejos anteriores, el jugador también puede considerar jugar en ciertos horarios únicamente. Esto evitará que se trasnoche por el juego, lo que lleva al insomnio y a tomar malas decisiones por el cansancio.

No consumas bebidas alcohólicas ni otras sustancias mientras juegas

Finalmente, siempre se debe recordar que es una muy mala idea jugar bajo la influencia de bebidas alcohólicas o sustancias similares. Esto se debe a que no se tiene conciencia plena, y se pueden tomar decisiones en este estado que después se lamentarán. 

Por ejemplo, el jugador puede hacer un depósito mayor al que se puede permitir, o puede apostar todo en un juego del que no está seguro.